Entre bobos anda el juego
de Francisco Rojas Zorrilla
Rojas Zorrilla es uno de esos autores que siempre he leído con verdadera pasión. Creo que sus obras son un paso más allá respecto a la dramaturgia que en el Siglo de Oro deja consolidada Lope, y contribuyen a que la dramaturgia nacional gane enteros en colorido y eficacia —de manera paralela a la obra de Calderón— hasta los años 40. Me atrevería a decir que las obras de ambos son la última evolución original de nuestro teatro patrio antes de que se eche a perder del todo, víctima de las influencias francesas que anegarán nuestro gusto dramático durante los siguientes dos siglos.
Y aunque habitualmente sus comedias requieran maneras un tanto excesivas, cercanas a la farsa, no faltan en sus obras —pegados a los personajes estrambóticos y desmedidos— momentos delicados, llenos de una lírica particular. Es decir, que sus personajes son de carne y hueso, y aman, y sufren penalidades de todo tipo tratando de nadar contra la corriente enloquecida que impone la sociedad en la que transcurre el argumento; reflejo casi grotesco de la realidad que habitaba el espectador. Este es el complicado equilibrio que se plantea en esta pieza: combinar el mecanismo, lleno de ritmo y contraste, del enredo que gobierna el figurón y permitir respirar a los personajes que lo necesitan. Y en ello estamos…
Eduardo Vasco
Director
Ayudante de dirección
Daniel Santos
Producción
Miguel Ángel Alcántara
Lucha escénica
José Luis Massó
Iluminación
Miguel Ángel Camacho
Vestuario
Lorenzo Caprile
Escenografía
Carolina González
Versión
Yolanda Pallín
Dirección
Eduardo Vasco
Creación y producción
CNTC / Noviembre Teatro
Reparto
Daniel Albaladejo (Don Pedro)
Arturo Querejeta (Cabellera)
José Ramón Iglesias (Don Lucas)
Isabel Rodes (Doña Isabel)
Fernando Sendino (Don Luis)
Rafael Ortiz (Carranza)
Elena Rayos (Andrea)
José Vicente Ramos (Don Antonio)
Antonio de Cos (Doña Alfonsa)
Madrid
Teatro de la Comedia
Sala Principal: Del 13 de febrero al 3 de marzo de 2019
Encuentro con el público: 21 de febrero de 2019
Duración de la obra: 1 hora y 25 minutos sin descanso