El gran mercado del mundo
de Calderón de la Barca.
En el océano que es el Siglo de Oro de la literatura castellana, una niebla espesa esconde el archipiélago de los autos sacramentales, un género escénico que ha quedado prácticamente inexplorado por nuestros escenarios. La niebla que difumina las formas y virtudes de esos autos tiene mucho que ver con las fragancias eucarísticas emanadas por un imaginario contrarreformista que se fue desinflando tras la paz de Westfalia, con el nacimiento de los nuevos estados nación y la eclosión definitiva del capitalismo como realidad insoslayable.
Los autos sacramentales eran una gran fiesta edificada sobre un universo filosófico («teológico», dirían sus contemporáneos), dirigida a un espectro amplísimo de la sociedad. Igual que las tragedias griegas o que la lírica cómica del XIX, el auto sacramental es teatro político para la multitud urbana. Por eso, la naturaleza alegórica de sus personajes tanto nos remite a las crisis clásicas que encontramos en los primeros trágicos democráticos y sus reflexiones sobre las ideologías arcaicas, como a las picarescas denuncias que lanzaban las revistas musicales del Paralelo barcelonés o de la Gran Vía madrileña, con personificaciones voluptuosamente simbólicas de la realidad política.
En nuestra época, las doctrinas de los mercados son cada vez más imperiosas y los estados nación van perdiendo a marchas forzadas esa soberanía política que los había erigido durante tres siglos en protagonistas del orden humano. Los autos sacramentales de Calderón, tan atentos a los seísmos que prepararían las bases de una Modernidad aún eurocéntrica, interpelan muy directamente a nuestra contemporaneidad, con las nuevas y profundas transformaciones que nos ha tocado vivir.
Xavier Albertí
Dirección
De la zarzuela y la revista al cabaret, la astracanada y las varietés, todo cabe en este Calderón «arrevistado» y celebrado por el público con risas, bravos y aplausos…Un largo trabajo de una compañía mixta de catorce actores del TNC y la CNTC en una fraternal y saludable coproducción.” JAVIER PÉREZ SENZ, EL PAÍS BARCELONA
Sonido
Jordi Bonet
Escenografía
Max Glaenzel
Caracterización
Angels Palomar
Iluminación
Ignasi Camprodon
Coreografía
Roberto G. Alonso
Vestuario
Marian García Milla
Dramaturgista
Albert Arribas
Versión y dirección
Xavier Albertí
Coproducción
CNTC / TNC
Reparto
Cristina Arias
Alejandro Bordanove
Antoni Comas
Elvira Cuadrupani
Jordi Domènech
Rubèn de Eguía
Roberto G. Alonso
Oriol Genís
Lara Grube
Silvia Marsó
Jorge Merino
Mont Plans
Aina Sánchez
David Soto Giganto
Madrid
Teatro de la Comedia
Sala Principal. Del 18 de septiembre al 27 de octubre de 2019
Encuentro con el público. 17 de octubre de 2019
Duración del espectáculo: 1 hora y 20 minutos aproximadamente