Inicio: 18 de noviembre de 2020
Final: 27 de diciembre de 2020
Producción: Martes Teatro
El enfermo imaginario
de Molière.
¿Cuántos enfermos imaginarios conocemos?
¿No hemos padecido nosotros mismos las más inmiseri- cordes dolencias de enfermedades de raíz psicosomática?
En 1673 Molière crea la que será su última comedia y morirá interpretándola. Ello dará pie a algunas de las más consolidadas tradiciones fóbicas de la gente de teatro a la hora de evitar determinados colores en escena. En España la víctima es el amarillo.
Cómo duele la hipocondría. Molière lo sabe y aprovecha ese saber para crear una de las más aceradas sátiras sobre el poder de la medicina, en una época que ha empezado a entregar al conocimiento científico la esperanza de la felicidad y la salvación.
Como dirá Thomas Bernhard, siglos más tarde: “nuestra única posibilidad de salvación está en encontrar un buen médico”. Argán, el protagonista de la comedia de Molière, no tendrá esa suerte y sus médicos utilizarán sus miedos para conseguir otros fines. Nosotros, sus espectadores, podremos reírnos y compadecernos.
Traducción
Mauro Armiño
Escenografía
Ezio Frigerio con Riccardo Massironi
Iluminación
Paco Ariza
Vestuario
Franca Squarciapino
Composición Musical
Daniel Espasa
Profesor de canto
Andreu Gallén / Jesús Gago
Dirección
Josep Maria Flotats
Producción
CNTC
Reparto
Anabel Alonso
Lola Baldrich
Bruno Ciorda
Francisco Dávila
Josep Maria Flotats
Belén Landaluce
Arturo Martínez Vázquez
Joaquín Notario
Eleazar Ortiz
Alejandro Sigüenza
Rubén de Eguía
Madrid
Teatro de la Comedia
Sala Principal. Del 18 de noviembre al 27 de diciembre de 2020
Encuentro con el público. 3 de diciembre de 2020
Funciones accesibles: viernes 27 de noviembre y jueves 3 de diciembre
Duración aproximada del espectáculo: 1 hora y 50 minutos sin descanso
¿Casualidad o coincidencia? Cuando Helena Pimenta, a quien agradezco su con- fianza, me invitó a trabajar en este prestigioso teatro; yo de gira aquellos meses aprovechaba los momentos libres para re- leer a Molière. En uno de estos todavía interminables trayectos en tren para acceder al norte de la península repasando El Enfermo me vino a la memoria la fecha de su última representación, el 17 de febrero de 1673 horas antes de su muerte y acto seguido la de su bautismo, el 15 de enero de 1622; esa ceremonia religiosa solía ocurrir dos o tres días después del nacimiento, por lo que bien puedo suponer que fue el 12 de enero cuando vio la luz; y es ese mismo día y mes en que yo nací. Se me ocurrió entonces que el 400 aniversario de esa fecha estaba al caer, y que no podía dejar pasar la ocasión para homenajear a mi Pa- tron. Los actores de la Comédie Française llamamos a Molière Patron, y al Teatro de la Comédie, La Maison de Molière. Y cada día, los actores y actrices, al entrar en esa Casa de Molière, saludamos al magnífico busto del comediógrafo, esculpido por Houdon, pellizcándole la nariz y diciendo: Bonjour, patron. Huelga decir que, con los siglos, a Molière le brilla la nariz.