Cuadernos del Teatro Clásico

El Siglo de Oro al otro lado del Atlántico es el título que hemos dado al último número de los Cuadernos de Teatro Clásico, con el que nuestra querida revista alcanza la treintena, y redondea su trayectoria. En él se plasma, por un lado, el trabajo de cooperación con instituciones extranjeras en proyectos de investigación, como sucede con el Laboratorio América, impulsado por la CNTC y desarrollado junto al complejo teatral General San Martín de Buenos Aires, que produjo el montaje de Los áspides de Cleopatra, de Francisco de Rojas Zorrilla, dirigido por Guillermo Heras.

Este número de Cuadernos acoge por primera vez un plan de coedición, con el que la CNTC se ha asociado al macroproyecto de investigación TC/12 Consolider. Es una gran satisfacción abrir las páginas de nuestra sede de papel a los doce equipos que lo conforman bajo la coordinación de la Universidad de Valencia, dando visibilidad a los resultados de una gran tarea de mejora del conocimiento.

Un homenaje a los 25 años de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, y a la vez un recuerdo agradecido a todos los que nos han ayudado a avanzar hasta donde nos encontramos hoy. En dos volúmenes, con abundante material gráfico.

Lope fue un escritor notabilísimo que revolucíonó, sin pretenderlo, la forma de concebir toda la literatura, particularmente la lírica y el teatro. Cambió también las relaciones con el público lector; es el primer poeta español, quizá el primer poeta europeo, que va ofreciendo a sus aficionados entregas periódicas de su creación en forma de libro venal, libro que existe porque hay un público dispuesto a comprarlo.

En el recorrido histórico del siglo XX, que implica continua revisión de los criterios, las formas y las finalidades, los años de 1920 a 1936 se nos perfilan con una importancia particular, y nos plantean la situación del teatro clásico español en época de renovaciones, propuestas artísticas revolucionarias y batallas, y el después de una guerra.

Lope fue un poeta fecundísimo, prolífico hasta el extremo, volcado en un género popular, inmediato y directo; pero en su frenética tarea de escritor encontró el tiempo y los medios para expresar sus opiniones sobre la esencia y sentido de la comedia.

Por primera vez hay un consenso bastante generalizado entre jóvenes creadores y público acerca de la actualidad de nuestros clásicos. Nunca ha habido tantas compañías dedicadas casi con exclusividad a su puesta en escena, y nunca se les ha prestado tanta dignidad como en nuestros tiempos.